Mis masajes fueron evolucionando con el tiempo. En el 2015 terminé un entrenamiento como Terapeuta Spa donde aprendí el masaje sueco clásico. Al comenzar a trabajar en mi emprendimiento entendí las necesidades y deseos de los clientes; así que me auto eduqué con técnicas en el masaje de tejido profundo y Tailandés. En el 2019 participé en un curso de masaje Thai Yoga el cual muy naturalmente se ajustó a mi práctica de yoga. Todo este conocimiento que yace desde la experiencia del sentir y entender los niveles más profundos y conscientes de la experiencia física me permitió comenzar a conectar con los cuerpos de mis client@s desde una nueva y más profunda existencia. Las técnicas se fueron transformando en movimientos únicos según cada cuerpo, cada alma.
Mi intención y deseo es que cada persona que recibe este masaje pueda reconectar y descansar en el verdadero placer de esta experiencia física. Sentir alivio, liberación y el amor por ser su propio y sincero ser.



